VIVIR SIGNIFICA ACERCARNOS Y DAR.
COMPARTIR CON LOS DEMÁS, AMAR, HABLAR,
ENRIQUECER LA VIDA DE LOS DEMÁS.
EL SUFRIMIENTO TIENE LA FINALIDAD DE HACERNOS
CRECER ESPIRITUALMENTE.
NADA OCURRE POR CASUALIDAD.
TODO LO QUE NOS OCURRE EN LA VIDA, OCURRE POR
UN MOTIVO POSITIVO.
EN LA VIDA DESPUÉS DE LA MUERTE TODOS OIREMOS
LA MISMA PREGUNTA:
¿ CUÁNTO SERVICIO HAS PRESTADO, HAS HECHO ALGO
PARA AYUDAR A LOS DEMÁS ?
SI ESPERAMOS HASTA ENTONCES PARA CONTESTAR,
SERÁ DEMASIADO TARDE.
NUESTRA ÚNICA FINALIDAD EN LA VIDA ES CRECER
ESPIRITUALMENTE. LA CASUALIDAD NO EXISTE.
CUANDO HEMOS APROBADO LOS EXÁMENES DE LO QUE
VINIMOS A APRENDER A LA TIERRA, SE NOS PERMITE
GRADUARNOS. SE NOS PERMITE DESPRENDERNOS DEL
CUERPO, QUE APRISIONA NUESTRA ALMA.
ENTONCES, ESTAREMOS LIBRES DE DOLORES, TEMORES Y
PREOCUPACIÓN.
ENTONCES, VOLVEMOS A CASA, A DIOS, QUE ES UN LUGAR
DONDE JAMÁS ESTAMO SOLOS, DONDE CONTINUAMOS
CRECIENDO ESPIRITUALMENTE, DONDE ESTAMOS CON
NUESTROS SERES QUERIDOS Y RODEADOS POR UN AMOR
QUE ES IMPOSIBLE IMAGINAR.
( " La rueda de la vida" Elisabeth Kubler-Ross)
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